Con motivo del delicado estado de salud del Papa Francisco, la Unidad Socialista manifiesta su sincera preocupación y expresa los mejores deseos de franca mejoría.
No podemos olvidar que el Papa ha hecho de su ministerio una obra ligada a la búsqueda del bien común y que viene rescatando valores que en esencia coinciden con nuestras propias convicciones de justicia social, solidaridad mutua y fraternidad entre los pueblos. Esa prédica le ha valido la crítica y aún el hostigamiento de parte de sectores privilegiados de la propia Iglesia y de las élites políticas y económicas. Reivindicamos sus expresiones sobre la necesidad de que los gobiernos de los diferentes Estados lleven a cabo políticas sociales indispensables para el buen vivir.
Dichos valores fueron explicitados en documentos como sus encíclicas “Fratelli tutti” y “Laudato Si” al remarcar “el camino de la fraternidad y la amistad social” para construir “un mundo mejor, más justo y pacífico, con el “compromiso de todos” en las relaciones cotidianas, en la vida social, en la política y en las instituciones.
Nos identificamos con su prédica en favor de los “descartados” actuales y futuros en este sistema horrendo donde la centralidad es el capital financiero (anarco-capitalismo de casino).
Asimismo, compartimos su reclamo por el cuidado del entorno natural, su llamado a una valiente revolución cultural ante el cambio climático y su fuerte crítica a los poderes económicos concentrados.
Por todas esas razones no somos indiferentes en estos momentos de pesar y nos solidarizamos con él y con todas y todos quienes tienen a Francisco como su guía espiritual.
Comité Ejecutivo Nacional